BIOGRAFÍA COLECTIVA

story

Malinche, Malinches, Malitzin, Marina, Malinali

Daiset Sarquis

Quien utiliza el silencio, callar, la escucha.
Quien utiliza el decir, pronunciar, nombrarlo.

¿Para qué enunciarte a ti, señor?

¿Para qué enunciar lo que vino conmigo: desecho, animal, sexo?

¿Para qué enunciar lo que se dijo, lo que se dice?

Estuve fuera del mundo, me salí, me sacaron, mi lengua me trajo devuelta.

Yo hablo de lugares, el lugar de mi lengua, una lengua que anduvo en todos lados,

el lugar de mis pies.

Esperé, esperé parada mucho tiempo.

Ahí parada escuché, escuché cosas que no me habían dicho nunca.

Escuché la palabra de los hombres, la palabra de ti señor, te escuché.

Hablabas mucho. Tu voz. Hablaban todo el tiempo.

Aprendí a decir como tú, repetí callada las cosas que nombraban.

Me lo dije en silencio, me lo dije a mi, me lo dije adentro:

camino, fuego, mujer, mujeres, paga, riña, frontera, a palos, comida, herida, muerto, muertos.

No se dijo madre, parto, hija.

No se dijo llanto, ni perro, ni casa.

No se dijo cuerpo, mano, brazo, no se dijo senos.

No se dijo respirar, no se dijo respirando.

¿Para qué enunciarte a ti, señor?

¿Para qué enunciar lo que vino conmigo: tu voz, la conquista, mis palabras?

¿Para qué enunciar lo que se dijo y lo que dicen?

Estuve fuera del mundo, me salí, me sacaron, mi lengua me trajo devuelta.

Yo hablo de lugares, el lugar de mi lengua, una lengua andariega,

la que me trajo,

una lengua que anduvo en todos lados.